Aromo (Acacia)

Especies: A.  armata, A. dealbata, A. floribunda, A. kempeana, A. longifolia, A. subulata, A. retinoides, A. verticillata

Origen: Australia, África del sur, Asia y Sudamérica

Género formado por 1.300 especies de árboles y arbustos de delicado follaje, con flores amarillas en forma de cabezuelas y de olor muy aromático.

La floración comienza con la estación fría y perdura hasta que finaliza. Hay especies provistas de espinas. Algunas son de hoja caduca pero la mayoría son perennifolias.

Proceden de zonas cálidas y soportan mal las heladas. Prefieren estar ubicadas a pleno sol y protegidas de vientos fuertes, aunque hay especies que toleran semisombra. Necesitan un lugar fresco para invernar, con una temperatura entre 5 y 10ºC. En cuanto al riego no son exigentes, siendo más abundante en verano.

Son plantas fijadoras de nitrógeno, por lo que contribuyen a la nitrificación del suelo. El suelo ideal es un suelo granítico, ligeramente ácido y poco húmedo, aunque hay especies como A. longifolia que soporta bien los calizos. La mejor época de plantación será a comienzos de la estación templada.

El abonado será el general del jardín, si están en contenedores individuales deberán abonarse durante todo el año porque enraízan muy profusamente y agotan pronto los nutrientes. Entre las plagas por las que se ven atacadas están las cochinillas acanaladas y entre las enfermedades puede verse afectada en suelos calizos por clorosis férrica que produce amarilleamiento de hojas. Durante los primeros años de crecimiento, precisa podas de formación para mejorar o corregir su aspecto, después de la floración. Quizás una de las acacias más vigorosas es la llamada Acacia dealbata conocida como «mimosa», que en su medio natural alzanza 30 metros de altura, aunque en Europa no sobrepasa los 10 metros.

Crece rápidamente. Las flores se agrupan en pequeños glomérulos. Las hojas son de color verde plateado y la corteza es azul verdosa cuando son jóvenes, pasando después a marrón claro y por último gris, con estrías. Se multiplican por lo general por semillas, que se mantienen en agua caliente durante un día antes de plantarlas. Hay especies que se reproducen muy bien por acodo en primavera.

Créditoselhogarnatural.com 

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